Y es que este famoso plato de pasta,
cubierta de una intensa salsa a base de huevos, queso y tocineta servida con
bastante pimienta negra, que se sirve en Roma y que es toda una institución, no
se salvó en mi cocina de sufrir una pequeña variante al agregarle a la
combinación de parmesano y pecorino 2 quesos más, junto con una lluvia de
albahaca finamente picada. El resultado de esta transformación es una pasta
contundente que me recuerda el delicioso sabor de una Quiche Lorraine y un
sabor más delicado al de una salsa 4 quesos tradicional, al sustituirlos por
quesos más suaves y no agregar más grasa con la crema de leche. Esta
experiencia fue de lo más divertida y se me ocurrió a último momento cuando un
mediodía, apurada por terminar el almuerzo, decidí hacer uno de nuestros platillos
favoritos super rápidos, una pasta carbonara. Estoy segura que no soy la única
y que tú seguramente has hecho una cantidad de transformaciones a tus
preparaciones de siempre para llevarlas a otro nivel, me encantaría conocer
alguna de ellas.
Ingredientes
500 gr de lingüinis
3 huevos
¼ de taza de queso pecorino romano
rallado
¼ de taza de queso manchego rallado
1/3 de taza de queso gruyere rallado
¼ de taza de queso parmesano rallado
Queso parmesano rallado adicional para
servir en la mesa
185 gr de tocineta ahumada
2 cucharadas de aceite de oliva
Albahaca al gusto
Sal y pimienta
Preparación
En una olla grande coloca suficiente
agua para cocer tu pasta y ponla al fuego. Pica en pequeños lardons o rectángulos,
colócalos en una cacerolita junto con el aceite de oliva, tápalos y llévalos a
la hornilla cociéndolos por unos 15 minutos a fuego bajo para que no se doren,
una vez transcurrido este tiempo, apaga el fuego y mantenlos tapaditos para
conservar la temperatura.
Al hervir el agua para la pasta, agrega sal
suficiente para salar ligeramente el agua y pon a cocer los lingüinis. Para preparar
la salsa pica la albahaca finamente, bate en un tazón los huevos junto con los
quesos rayados, un poco de pimienta y agrega la albahaca. Coloca un colador
para pasta sobre un tazón grande donde puedas servir toda la pasta y una vez
que los lingüinis estén al dente cuélalos sobre el mismo permitiendo que el
agua caliente de la cocción caiga dentro del tazón para calentarlo, no
descartes el agua hasta que esté lista la pasta para ser servirda. Por otro
lado, devuelve la pasta a la olla caliente, agrega la tocineta y remueve muy
bien para que todo el aceite la impregne y se distribuya bien la tocineta
cocida, a continuación agrega la mezcla de huevos crudos y queso removiendo
rápida y constantemente toda la preparación hasta lograr una emulsión
convirtiéndose en una salsa blanca que recubra los lingüinis. Si notas que está
un poco seca y escasa de líquido agrega un poco de agua de la cocción que
tienes en el tazón de servicio hasta lograr la consistencia que te guste. Ahora
ya puedes descartar el agua y pasar tu preparación al tazón de servicio.
Sirve
de inmediato y coloca un poco más de queso parmesano en la mesa para que tus
comensales se sirvan sobre ella si así lo desean. Bon apettit.
Rinde 4 porciones
De perdón nada! yo creo que los romanos deberían hacerte una estatua: qué carbonara tan llena de sabores. Buenísima!
ResponderEliminarHey!!! Cómo has estado? Ya leí que atareada. Gracias, no te imaginas la dimensión que cogió esta pasta, si la haces me cuentas que te pareció y si le gustó a tu chico también. Por mi parte voy probar las dos recetas que tienes de brownies, estoy buscando una que le guste mucho a mi hijo.
EliminarSaludos
I just love carbona. Se ve delicioso. He estado viajando y estoy atrasada en visitar.
ResponderEliminarHey Norma!!! Gracias, ¿a donde haz ido viaje? que bueno, espero hayas disfrutado esos viajes. Me alegra que estés de regreso
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